En un ambiente íntimo, relajado y, al mismo tiempo, disruptivo, el restaurante Ilícito es una mezcla de colores fuertes con notas sobrias, pero también es una simbiosis de obras de arte y de sensaciones.
Con acceso por la Rua do Almada, una de las zonas más emergentes de la ciudad, el espacio se ha definido como un escaparate de la ciudad local, con una decoración vintage e icónica.
Con capacidad para 95 personas sentadas y apertura diaria, ofrece almuerzos ejecutivos y cenas a la carta.